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03/08/2006 10:25:00
Efe
El Bañuelo de Granada, considerado uno de los baños árabes más antiguos y completos de España, reabrió el día 1 sus puertas al público una vez concluidas las obras de conservación y reparación a las que ha sido sometido durante un periodo de tres meses con una inversión de 62.178 euros, a cargo de la Junta.
La intervención ha resuelto una serie de patologías que estaban afectando al edificio, en especial a su fachada exterior, que da a la céntrica y turística Carrera del Darro, y eliminar humedades que empezaban a afectar a la conservación de estos baños árabes.
Según explicó a los periodistas el delegado de Cultura, José Antonio Pérez Tapias, ha sido reparado el sistema de circulación y evacuación de aguas en la vivienda aneja al edificio, origen de los problemas de conservación que presentaban los baños, así como el sistema de alimentación y desagüe de la alberca del patio.
La fachada del edificio ha sido tratada con "criterios estrictos" en cuanto al empleo de materiales y su restauración para recuperar su estado original, mientras que se han limpiado las cubiertas, eliminado la vegetación y los residuos acumulados, y garantizado la estanqueidad para evitar filtraciones, explicó Pérez Tapias.
Declarado Bien de Interés Cultural (BIC) en la figura de monumento, El Bañuelo recibe una media de 150 visitas diarias que se incrementan durante los meses de verano por la afluencia turística y por su ubicación, en una de las zonas más visitadas de la ciudad.
Desde hoy, reabre sus puertas de lunes a sábado con entrada gratuita, señaló el delegado de Cultura, que subrayó la integración del edificio, ubicado a las faldas de la Alhambra, con los monumentos de su entorno, lo que contribuye a crear una "red monumental que tiene uno de sus ejes en el agua".
Pérez Tapias lamentó la aparición ya de una pintada en la fachada del edificio y abogó por la progresiva retirada en los monumentos de la ciudad de estas "pinturas de nulo valor artístico".
Por su parte, la delegada del Gobierno de la Junta, Teresa Jiménez, dijo que la reapertura de estos baños, de la época zirí, permite ofrecer de nuevo a la ciudad "uno de los elementos esenciales de la historia de Granada".
El Bañuelo o Baño del Nogal ocupa una superficie de 380 metros cuadrados y cuenta con una casa anexa de dos plantas, donde residían sus cuidadores, a través de cuyo zaguán se accede a un pequeño patio interior que da paso a los baños.
El patio, con una alberca central, es la antesala del vestuario de los baños, cubierto por una bóveda de medio cañón con lucernas.
El edificio, que dispone de tres salas, una fría, otra templada o de vapor y una tercera caliente, no sólo cumplía una función higiénica en la cultura árabe de la Granada islámica, sino también un componente social y de encuentro, explicó el delegado.