Se presenta en Málaga el libro 'Los Reyes de la Alhambra'

Poesía, alquimia, matemática y astronomía. Hombres de honor y taimados contrabandistas. Odaliscas de belleza singular deseadas hasta la locura y un extenso legado cultural expoliado al fin de los más de 400 años de mitos y leyendas; todo ello es el pasado de una Andalucía que fue musulmana. Aunque podría ser solo el argumento de 'Los Reyes de la Alhambra', el último libro del escritor malagueño Paco Bueno. Pero es también la verdad de un pueblo que no debe olvidar que guarda en sus venas la misma sangre musulmana que un día caluroso de 1487 se derramó por sus calles tras el asedio de unos Reyes Católicos en plena cruzada.

Licenciado en Teología y estudioso de las religiones del mundo, Bueno propone en 'Los Reyes de la Alhambra' un rayo de luz sobre el pasado histórico de la Andalucía de entre 1013 y 1492, los más de cuatro siglos durante los cuales era un gran reino fortificado constituido por los que abrazaron la fe musulmana -mulhadíes, almorávides- «pero españoles como nosotros», matiza el autor. «Cuando la gente piensa en nuestro pasado musulmán suele hacerlo creyendo que los musulmanes de Córdoba, Granada o Málaga eran magrebíes o árabes. Y no era así. Eran españoles, de aspecto mediterráneo, como nosotros, sólo que adscritos a otra religión monoteísta diferente al cristianismo», aclara.

Documentación

La historia del Reino de Granada es la crónica de un pueblo culto y refinado, adalid de la belleza y amante de la astronomía, las matemáticas y la medicina, que comprendía las actuales provincias de Almería, Málaga, Granada, y la parte meridional de las de Jaén y Córdoba. Nació en 1013, tras el hundimiento del Califato cordobés que supondría la ascensión de los Reinos de Taifas, y se desarrolló bajo el mandato de un reinado que a lo largo de estos años ostentaron 29 monarcas distintos. Sus gestas, que ahora resume Bueno en 670 páginas, han llegado a nuestros días a través de la tradición oral y los escritos de cronistas, poetas e historiadores cristianos y musulmanes que Bueno ha consultado hasta la saciedad «sin ánimo de hacer un tratado histórico pero con rigor y respeto hacia los hechos».

El resultado de años de investigación se traduce ahora en 30 capítulos de ejercicio intertextual de recreación de esas fabulaciones orales, de esas historias coloristas de caballeros y amores reñidos que como punto de partida toman el nombre de alguno de los huéspedes del gran palacio granadino, de los zíríes al derrotado Boabdil, y describen los usos y costumbres de una época. «Precisamente en uno de estos relatos sobre los que he vuelto, titulado 'El enamorado Macías' se inspiró también Mariano José de Larra para escribir 'El Doncel de Don Enrique el Doliente', famoso estos días por ser el relato que Letizia eligió como regalo de pedida», recuerda.